Actualmente la seguridad de una puerta se puede medir en 5 diferentes grados o clases, según la normativa UNE-85160:
Clase 1 y 2: Seguridad baja ante ataques básicos (Palancas, ganzúas, etc.).
Clase 3: Puertas de seguridad testadas frente a herramientas de robo profesional.
Clase 4 y 5: Buena estructura y alto grado de resistencia. Incorporan cerraduras especiales de alta seguridad, cuyos componentes han ofrecido un buen comportamiento frente ataques con herramientas profesionales avanzadas (lanzas térmicas, taladros eléctricos, palancas, ganzúas, etc.).
Normativa Española UNE 85160:2013: Resistencia anti ataques violentos al sistema de cierre y a los tipos de instalación en base a diferentes dígitos, cada uno con un tipo de ensayo, que reproduce la realidad actual de los ataques de habilidad y/o de fuerza bruta, contemplando la resistencia de la estructura de la puerta y la protección del sistema de cierre frente a los ataques manuales.
Consejos de instalación puertas acorazadas:
- Un buen anclaje del marco al muro, evitará que la puerta pueda ser arrancada en bloque mediante un simple gato hidráulico. El anclaje o incluso soldadura del marco de la puerta a una estructura metálica interna que vaya desde el suelo hasta el techo, es siempre la opción más segura y recomendable.
- Instalar una cerradura con doble escudo de seguridad y que cuente con un cilindro anti ganzúas y taladros, es tan importante o más que la resistencia global de la estructura acorazada frente a los ataques violentos.
- Por último queremos resaltar que la calidad de la llave también resulta fundamental. De nada servirá contar con la puerta acorazada más resistente si contamos con una llave que resulte fácilmente copiable en menos de 5 minutos en cualquier cerrajería. Evite este tipo de oportunismo con la adquisición de una llave de alta seguridad.